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En este evento, los asistentes han tenido la oportunidad de compartir con los residentes talleres, actividades lúdicas y música en directo. Además, han degustado algunos de los platos elaborados por los cocineros de la residencia.
También, durante esta jornada, expertos de ORPEA han explicar cómo afrontar la enfermedad de Alzheimer y cómo se puede mantener el bienestar y la autonomía de la persona el mayor tiempo posible, a través de modelos de cuidado y terapias innovadoras y efectivas como la estimulación sensorial, las terapias de reminiscencia, las terapias con animales, los programas de reducción de polimedicación, los planes de mejora de la calidad del sueño y comidas texturizada.
La directora Sanitaria de ORPEA, Victoria Pérez, ha asegurado que los residentes con alzhéimer requieren cuidados progresivos y profesionales, adaptados a las distintas etapas de la enfermedad. “El desafío de los centros es proporcionar una atención individualizada y cada vez más especializada, que proporcione un completo abordaje y una visión holística para estimular, potenciar y mantener las capacidades de los residentes, dependiendo del estado cognitivo del que se parte”, ha sostenido la doctora Pérez.
Esta atención comienza desde el mismo momento del ingreso en las residencias, donde el equipo multidisciplinar (médico, enfermería, psicología, fisioterapia, terapia ocupacional, logopeda, etc.) realiza una valoración integral y pone en marcha pautas, tratamientos y cuidados personalizados.
Para conseguir esta atención integral y personalizada, las residencias ORPEA cuentan con unidades de vida diferenciadas y servicios especializados. Estas unidades se adaptan a las necesidades particulares de los residentes, según su grado de dependencia. Entre ellas, se encuentran las Unidades Protegidas de Alzhéimer y otras Demencias (UPAD) o los servicios específicos para pacientes con demencia. “Estos espacios están diseñados para que los residentes con algún tipo de demencia puedan vivir de manera segura y lo más autónoma posible, y tienen recursos que favorecen su estimulación cognitiva y emocional”, ha asegurado la directora Sanitaria de ORPEA.
Otro tema protagonista en esta jornada de puertas abiertas, han sido las relaciones intergeneracionales. ORPEA fomenta que mayores y niños compartan experiencias. Actualmente, existen evidencias científicas que demuestran importantes beneficios en la relación entre distintas generaciones.
Con estas actividades, los centros ORPEA buscan devolver sentimientos de vitalidad a los residentes y aumentar su autoestima. Pero también se consigue que se sientan útiles y revivan la ilusión por cosas o situaciones que para ellos pertenecen al pasado. Por otra parte, este tipo de iniciativas aportan a los niños y adolescentes experiencia, conocimiento, anécdotas, consejos sinceros y mucho cariño.
Servicios especializados gracias a sus unidades de atención a demencias y alzhéimer, psicogeriatría o gran dependencia, dando así cobertura y tratamiento a la necesidad de cada mayor.
